Ago7-13: Victoria Sobre el Pecado

Puntos de Enseñanza

1. ¿Por qué dice Pablo aquí “muerto al pecado”? ¿Qué significa eso?

RESPUESTA:

• Rom. 6:1—“¿Qué, pues, diremos?”—Esta expresión todavía se refiere al capítulo 5.
• Rom. 5:21—Mediante Cristo, la gracia puede llegar a reinar por la justicia (justificación).
• Recuerden que esta justificación implica, en realidad, el borramiento del pecado por la fe, lo que requiere una vida de victoria. Romanos 6 nos dice cómo es esto posible.
• “Muerto al pecado” implica vivir una vida de justificación que permita que la gracia obre en el corazón.
• Vivir una vida que pase por la experiencia de la justificación y la victoria sobre el pecado es lo que se conoce como la santificación. 

2. ¿Cómo es que uno llega a tener la experiencia de morir al pecado?

RESPUESTA:

• Rom. 6:1-4—Hemos sido bautizados (por la fe) en la muerte de Cristo, sepultados en la tumba de agua y resucitados a una nueva vida en Cristo. 

3. ¿Cuál es la definición de plantado y enterrado?

RESPUESTA:

• Rom. 6:5—plantado juntamente—G4854: crecido junto con o unido con.
• Rom. 6:4—sepultados juntamente con él—G4916: enterrado con-sepultados juntos (Col. 2:12).

• El término plantado juntamente implica más que sólo ser enterrado. “Plantado juntamente” significa estar unido con algo o con alguien; o crecer junto con algo o con alguien. El texto está diciendo que podemos ser “plantados juntamente” en la semejanza de su resurrección. En otras palabras, estamos tan estrechamente unidos con Jesús que todo lo que Él hace, también lo hacemos con Él por la fe.

4. ¿Cuál es el significado del bautismo según Romanos 6?

RESPUESTA:

• Rom. 6:4, 5—Escogemos morir al pecado como Jesús lo hizo; entonces, por la fe somos enterrados bajo el agua. Cuando salimos del agua, esto simboliza que hemos sido resucitados a una nueva vida en Cristo Jesús.

5. ¿Por qué Pablo usa el término crucificado?

RESPUESTA:

• Rom. 6:6 Crucificado con—¿Puede una persona crucificarse a sí misma?
• Nosotros debemos elegir morir al pecado pero no podemos lograr hacernos morir al pecado. Dios tiene que concedernos el poder para morir al pecado. Pero al someter nuestra voluntad a la voluntad de Dios, morimos al pecado.

OBSERVACIÓN:

• Estar muertos al pecado significa básicamente permanecer en el estado de ser justificado.
• Se usa la ilustración del bautismo para ejemplificar nuestra muerte espiritual al pecado y el entierro del pecado para resucitar como una nueva criatura en Cristo con la esperanza de la resurrección.
• ¿Por qué Pablo usa la palabra crucificar en lugar de alguna otra forma de muerte del yo? Pablo quiere que nos demos cuenta que no podemos morir al pecado por nosotros mismos. Debemos decidir rendirnos a Dios y permitirle que extirpe el pecado que existe en nosotros.

6. ¿Qué significa “resucitado a una vida nueva”?

RESPUESTA:

• Rom. 6:4—En vida nueva --renovación.
• Note Romanos 12:1, 2—transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento.
• Rom. 6:2, 4-12 El pecado ya no se enseñorea de nosotros. Somos liberados de la esclavitud del pecado y debemos vivir una nueva vida con Cristo.
• Si estamos muertos al pecado, también tenemos la esperanza de la resurrección.

7. ¿Cómo es posible que el pecado ya no ejerza dominio sobre nosotros?

RESPUESTA:

• Rom. 6:11—Consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios.
• Rom. 6:13-14—Ríndanse plenamente a Dios.
• El secreto se encuentra en a qué o a quién decidimos rendirnos. Podemos rendir nuestros miembros (mente y/o cuerpo) para practicar el pecado o podemos rendirnos para hacer la voluntad de Dios, por nuestra elección.

8. ¿Por qué no estamos bajo la ley?

RESPUESTA:

• Rom. 6:14-16—Porque estamos decidiendo morir al pecado y rendirnos a la voluntad de Dios.
• Rom. 8:1—Cuando andamos conforme al Espíritu, rindiéndonos a Cristo y eligiendo no andar conforme a la carne (continuar en la vida de pecado), ya no somos condenados por la ley.
• “Bajo la ley” significa la condenación de la ley por causa del pecado, para el cual la penalidad es la muerte.
• La gracia incluye la ofrenda de la justificación, la misma que quita el pecado y, por ende, elimina la penalidad de la muerte. 

9. ¿Concede la gracia la licencia para pecar o continuar quebrantando la ley de Dios?

RESPUESTA:

• Rom. 6: 14, 15—No, más bien nos concede el poder para vivir victoriosa­mente. 

10. ¿Cómo resume Pablo el sexto capítulo de Romanos?

RESPUESTA:

• Rom. 6:19—Así como presentaron sus miembros para servir a la iniquidad, así ahora presenten sus miembros para servir a la justicia.
• 6:20—Cuando estaban sirviendo al pecado, no poseían la justicia.
• Rom. 6:21—El fruto del pecado lleva a la muerte.
• Rom. 6:22—Ahora, que han sido liberados del pecado y se han convertido en siervos de Dios, su fruto es la santificación, la misma que los guiará a la vida eterna.
• Rom. 6:23—El pecado trae la muerte. La dádiva de Dios (gracia) trae vida eterna a través de Jesucristo.

OBSERVACIÓN:

• “Resucitados a una vida nueva” significa que nuestra voluntad es liberada del poder del pecado; por lo tanto, tenemos poder para la victoria en Cristo y tenemos la esperanza de la resurrección.
• Si nos consideramos a nosotros mismos como muertos al pecado y rendimos nuestra voluntad a Dios, el pecado no puede ejercer dominio ni gobernar sobre nosotros.
• El no estar bajo la ley, sino bajo la gracia, significa que no estamos bajo la condenación de la ley porque estamos muertos al pecado y vivos en Cristo—Justificados.
• La gracia no nos concede el derecho de continuar quebrantando la ley, pero nos da el poder y el deseo de guardar la ley y, así, dejar de pecar.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

• ¿Está entonces libre para violar la ley de Dios? El apóstol Pablo dice: "¿Abrogamos pues la ley por medio de la fe? ¡No por cierto! antes bien, hacemos estable la ley." "Nosotros que morimos al pecado, ¿cómo podremos vivir ya en él?" Y San Juan dice también: "Este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos." (Romanos 3: 31; 6: 2; 1 Juan 5: 3, V.M.) En el nuevo nacimiento el corazón viene a quedar en armonía con Dios, al estarlo con su ley. Cuando se ha efectuado este gran cambio en el pecador, entonces ha pasado de la muerte a la vida, del pecado a la santidad, de la transgresión y rebelión a la obediencia y a la lealtad. Terminó su antigua vida de separación con Dios; y comenzó la nueva vida de reconciliación, fe y amor. Entonces "la justicia que requiere la ley" se cumplirá "en nosotros, los que no andamos según la carne, sino según el espíritu." (Romanos 8: 4, V.M.) Y el lenguaje del alma será "¡Cuánto amo yo tu ley! todo el día es ella mi meditación." (Salmo 119: 97.)  {CS 468.1}
• … ¿Has vivido la vida de Cristo? ¿Has estado buscando las cosas que vienen de lo alto? Cuando tomaste tus votos bautismales, ¿estabas muerto al pecado y al mundo, o fuiste sepultado en el bautismo mientras estabas todavía vivo? Es algo muy terrible el ser enterrado estando vivo. {BEcho, 23 de marzo, 1903, párr. 1} 
• Los que están muertos al pecado y al mundo están también muertos a la moda y el orgullo. Tienen mucho cuidado en sus gastos. Cuando los mensajeros del evangelio entran en campos nuevos para llevar la verdad a los que nunca la han oído antes, los que han muerto al mundo contribuyen con liberalidad para el sostén de estos mensajeros. Dan para esta obra cada centavo que puedan ahorrar. No gastan nada para gratificarse egoístamente ni para la vanidad de sus hijos. {BEcho, 23 de marzo 23, 1903, párr. 2}
• Oren, oh, oren fervientemente, “Pon tu Espíritu, Señor, tu Espíritu Santo dentro de mi corazón, para que pueda ser sincero en guardar mis votos bautismales.” Ore para que la intercesión de Cristo en su favor no sea en vano. Ore para que la incredulidad ya no le lleve a vivir una vida que testifique en contra de la verdad; que ya no le lleve a afirmar que está en el servicio de Dios en su vida práctica siendo que, a causa de una voluntad pervertida, revela que no está produciendo los frutos del Espíritu. Ore por el poder para demostrar al mundo que está muerto al pecado y que su vida está escondida con Cristo en Dios. {18MR 105.2}  

CONCLUSIÓN:

• Muerto al pecado es vivir una vida de justificación, permitiendo que la gracia obre en el corazón.
• El bautismo es un símbolo de la muerte al pecado, enterrando nuestra vida antigua de iniquidad y resucitando a una nueva vida de victoria en Cristo.
• Pablo usa la palabra “crucificado” porque no podemos morir al pecado por nosotros mismos, esto es algo que debemos elegir, pero sólo Dios puede obrar esta experiencia en nuestras vidas.
• Esta nueva vida en Cristo es posible cuando elegimos cambiar de amo. Cristo rompe las cadenas del pecado y nos da el poder para seguir eligiendo el camino de Cristo.  
• El secreto para que el pecado no continúe gobernando sobre nosotros es que debemos considerarnos como muertos al pecado y rendirnos a Dios continuamente.
• La razón por la que ya no estamos bajo la ley es que hemos sido justificados. La justificación elimina la condenación de la ley, así que ya no nos encontramos bajo la penalidad de la muerte.  
• La gracia no nos concede la licencia para pecar; más bien, nos da el poder para obtener la victoria.

PREGUNTAS DE APLICACIÓN:

• ¿Ha sido usted bautizado en la muerte de Cristo, ha sepultado su vida pasada de pecado y ha resucitado a una vida nueva en Cristo, o todavía está viviendo la vida antigua de pecado?
• Posiblemente usted fue bautizado pero no comprendió o experimentó la muerte al pecado y la vida nueva en Jesús. ¿Escogerá hoy tener esta experiencia?
• ¿Está usted escogiendo ser crucificado con Cristo, reconociendo que usted no puede cambiarse a sí mismo?
• ¿Está usted escogiendo vivir la vida nueva en Cristo considerándose a sí mismo muerto al pecado y vivo para Dios?
• ¿Está usted rindiéndose a la voluntad de Dios y permitiéndole ser su Señor o todavía está sirviendo al pecado?
• ¿Está usted experimentando el poder de la gracia de Dios para vivir una vida de victoria?