Puntos de enseñanza
1. Lee Gén. 1:1; 2:15 y contesta las siguientes preguntas.
PREGUNTAS:
- ¿Quién creó la tierra?
- ¿Quién tenía que cuidar de la tierra?
- ¿A quién le pertenece la tierra?
2. Lee Éxo. 20:3-17 y contesta las siguientes preguntas.
PREGUNTAS:
- ¿De qué maneras protegen el medio ambiente los Diez Mandamientos?
- ¿Qué responsabilidades para con nuestro medio ambiente podrían estar establecidas en los Diez Mandamientos?
- ¿Cómo afecta al medio ambiente que nos olvidemos de nuestro Creador y del sábado?
- ¿Cómo afecta al medio ambiente que no seamos respetuosos de nuestros padres, de la propiedad de otros y de la vida misma?
3. ¿Qué sucedió como resultado directo del pecado?
RESPUESTA:
- Gén. 3:14--19—La tierra y las serpientes fueron malditas, habría dolor en el parto y enemistad entre la simiente de Dios y los seguidores de Satán.
- Gén. 3:18—La tierra produciría espinas y cardos.
4. ¿Qué ha sucedido en el reino animal?
RESPUESTA:
- Gén. 9:2—habría temor entre los animales y el hombre.
- Rom. 8:22—toda la creación gime y está con dolores de parto
OBSERVACIÓN:
- Dios es el dueño de esta tierra.
- Dios ha puesto a los humanos como mayordomos de Su creación.
- Los Diez Mandamientos afectan directamente la forma en que tratamos la creación de Dios.
- Si rechazamos el hecho de la creación y el Sábado, ya no tenemos protección para la familia ni pasamos tiempo juntos—lo que lleva a la desintegración de la familia; ya no tenemos respeto ni valoramos la maravillosa persona que Dios quiso que fuéramos al crearnos ni por toda la creación.
- Si rechazamos a nuestro Creador, no tendremos ninguna necesidad ni le daremos el verdadero valor a ninguno de sus mandamientos.
- Por el pecado toda la creación sufre y está bajo la maldición del pecado.
5. ¿Qué se requiere de nosotros como mayordomos de la tierra?
RESPUESTA:
- 1 Cor. 4:2—los mayordomos deben ser fieles.
- 1 Pedro 4:10—Somos mayordomos no solamente de las cosas terrenales sino también de la gracia de Dios.
6. ¿Cómo va a lidiar Dios con los mayordomos infieles que destruyen la tierra?
RESPUESTA:
- Apo. 11:18—Dios destruirá a aquéllos que destruyen la tierra.
7. ¿Será algo herido, muerto, o destruido en la nueva tierra?
RESPUESTA:
- Isa. 11:9; 65:25—Nada dañará ni destruirá
- Isa. 11:7—Los osos y los leones serán vegetarianos
- Isa. 65:25—Los lobos y las serpientes serán vegetarianos/ comerán polvo.
8. ¿Habrá alguna enfermedad, dolor, muerte, o pecado en la Nueva Tierra?
RESPUESTA:
- Apo. 21:4—no habrá más llanto, ni muerte, ni clamor, ni dolor
- Isa. 33:24—No habrá enfermedad y el que allí habite será absuelto de pecado.
OBSERVACIÓN:
- Como mayordomos de la creación de Dios se nos exige fidelidad en el cuidado de la tierra.
- Si hacemos cosas que destruyen la tierra, que no son necesarias para vivir, entonces Dios nos destruirá a nosotros.
- Nada hará daño o destruirá en la tierra nueva.
- Incluso los animales que hoy son carnívoros serán vegetarianos.
- No habrá más enfermedades, dolor, sufrimiento, muerte ni pecado en la Nueva Tierra o en el cielo.
PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR:
- ¿Qué decisiones puedes tomar que te ayuden a cuidar mejor de la tierra?
- ¿Qué decisiones puedes tomar que ayudarían a proteger a los animales para que no sufran?
- ¿Qué puedes hacer para ayudarte a ti mismo y a otros para cuidar mejor de la tierra?
- ¿Cómo el vivir como cristianos y el testificar de Cristo ayudan en poner límites al sufrimiento en esta tierra?
9. ¿Qué ánimo especial se da a quienes se ocupan de las cosas pequeñas?
RESPUESTA:
- Lucas 16:10, 11—Los que son fieles en las pequeñas cosas serán fieles en las cosas grandes y serán contados como dignos de las riquezas eternas.
OBSERVACIÓN:
- Jesús quiere que seamos fieles.
- Los hábitos de fidelidad empiezan con cosas pequeñas y a medida que aprendemos a cuidar de las cosas pequeñas en la vida entonces nos serán confiadas las mayores riquezas—la vida eterna.
ESPÍRITU DE PROFECÍA
- Si los hombres cumplieran sus deberes como fieles mayordomos de los bienes de su Señor, no habría quién clamara por pan, nadie sufriría privaciones, nadie estaría desnudo y con necesidad. Es la infidelidad de los hombres la que provoca el estado de sufrimiento en el que está sumergida la humanidad. Si tan sólo los que han sido hechos mayordomos utilizaran los bienes de su Señor para el propósito con que les fueron dados, no existiría este estado de sufrimiento. El Señor prueba a los hombres dándoles una abundancia de cosas buenas, así como probó al hombre rico de la parábola. Si somos infieles en las riquezas terrenales, ¿quién nos confiará las riquezas verdaderas? Los que han soportado la prueba en la tierra, los que han sido hallados fieles, los que obedecieron las órdenes del Señor de ser misericordiosos y de usar sus medios para el avance de su reino, oirán, de los labios de su Dueño: "Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor" (S. Mateo 25: 21). Review and Herald, 26 de junio de 1894. {Reflejemos a Jesus 220.6}
- Sea progresiva la reforma alimenticia. Enséñese a la gente a preparar alimentos sin mucho uso de leche o mantequilla. Expliquémosle que llegará pronto el tiempo en que será peligroso usar huevos, leche, crema o mantequilla, porque las enfermedades aumentan proporcionalmente a la maldad que reina entre los hombres. Se acerca el tiempo en que, debido a la iniquidad de la especie caída, toda la creación animal gemirá bajo las enfermedades que azotan nuestra tierra. {JT, tomo 3, 139.2}
- Vemos en la cara destruida de la naturaleza, en las rocas partidas, en las montañas y precipicios, lo que nos dice que un gran mal ha sido hecho, que los hombres han abusado de los dones de Dios, se han olvidado del Creador, y que el Señor se entristeció y castigó a los transgresores de su ley, y como resultado tenemos sus efectos en la creación. Las tormentas se descargan con violencia destructiva. El mal viene al hombre y la bestia y la propiedad. Debido a que los hombres siguen transgrediendo la ley de Dios, Él quita su defensa. El hambre, calamidad por el mar, y la pestilencia que camina al medio día, le siguen porque los hombres se han olvidado de su Creador. El pecado, la plaga del pecado, desfigura y echa a perder nuestro mundo, y la agonizante creación gime bajo el pecado de sus habitantes. Dios nos ha dado facultades para ser cultivadas, para mejorarlas para su gloria y para la eternidad. {2MR 308.1}
- La raza está gimiendo bajo un peso de dolor acumulado debido a los pecados de generaciones anteriores. Y, sin embargo, con apenas una reflexión o cuidado, hombres y mujeres de la generación presente dan rienda suelta a la intemperancia hasta la saciedad y embriaguez, y con eso dejan, como un legado para la próxima generación, enfermedad, intelectos debilitados y costumbres corrompidas {Testimonios, tomo 4, pág. 31}.
CONCLUSIÓN:
- Dios creó la tierra y es el dueño de ella.
- Se nos ha confiado como mayordomos el cuidado de la tierra.
- Los Diez Mandamientos son un cerco de protección especial para el pueblo de Dios y la creación pero si se los rechaza, entonces el valor de la vida y de toda la creación de Dios se pierden de vista.
- Por causa del pecado, toda la creación está sufriendo bajo la maldición.
- Como mayordomos Dios requiere de nosotros que seamos fieles en cuidar la tierra.
- Dios destruirá a todos los que destruyen la tierra.
- ¡La Tierra Nueva y el cielo no tendrán nada que haga daño o que destruya; no habrá muerte ni dolor ni pecado—y aun los animales serán vegetarianos!
PREGUNTAS DE APLICACIÓN:
- ¿Estas haciendo todo lo que puedes para aliviar el sufrimiento de los animales y de los seres humanos?
- ¿Tienes algunos hábitos que podrían ser modificados de manera que menos animales tengan que sufrir?
- ¿Estás pidiéndole a Dios que te ayude a ser un mayordomo fiel?
- ¿Haz entregado tus posesiones a Dios y buscas cuidar de esas cosas fielmente?
- ¿Estás buscando salvar a tantas almas como te sea posible de la destrucción?