Sunday, April 25, 2010

Abril 24-30: El Medio Ambiente


Puntos de enseñanza

1. Lee Gén. 1:1; 2:15 y contesta las siguientes preguntas.

PREGUNTAS:

  • ¿Quién creó la tierra?
  • ¿Quién tenía que cuidar de la tierra?
  • ¿A quién le pertenece la tierra?
2. Lee Éxo. 20:3-17 y contesta las siguientes preguntas.

PREGUNTAS:

  • ¿De qué maneras protegen el medio ambiente los Diez Mandamientos?
  • ¿Qué responsabilidades para con nuestro medio ambiente podrían estar establecidas en los Diez Mandamientos?
  • ¿Cómo afecta al medio ambiente que nos olvidemos de nuestro Creador y del sábado?  
  • ¿Cómo afecta al medio ambiente que no seamos respetuosos de nuestros padres, de la propiedad de otros y de la vida misma?
3. ¿Qué sucedió como resultado directo del pecado? 

RESPUESTA:

  • Gén. 3:14--19—La tierra y las serpientes fueron malditas, habría dolor en el parto y enemistad entre la simiente de Dios y los seguidores de Satán.
  • Gén. 3:18—La tierra produciría espinas y cardos. 
4. ¿Qué ha sucedido en el reino animal?

RESPUESTA:

  • Gén. 9:2—habría temor entre los animales y el hombre.
  • Rom. 8:22—toda la creación gime y está con dolores de parto 
OBSERVACIÓN:

  • Dios es el dueño de esta tierra.
  • Dios ha puesto a los humanos como mayordomos de Su creación.
  • Los Diez Mandamientos afectan directamente la forma en que tratamos la creación de Dios.
  • Si rechazamos el hecho de la creación y el Sábado, ya no tenemos protección para la familia ni pasamos tiempo juntos—lo que lleva a la desintegración de la familia; ya no tenemos respeto ni valoramos la maravillosa persona que Dios quiso que fuéramos al crearnos ni por toda la creación.
  • Si rechazamos a nuestro Creador, no tendremos ninguna necesidad ni le daremos el verdadero valor a ninguno de sus mandamientos.
  • Por el pecado toda la creación sufre y está bajo la maldición del pecado.
5. ¿Qué se requiere de nosotros como mayordomos de la tierra?

RESPUESTA:

  • 1 Cor. 4:2—los mayordomos deben ser fieles.
  • 1 Pedro 4:10—Somos mayordomos no solamente de las cosas terrenales sino también de la gracia de Dios.
6. ¿Cómo va a lidiar Dios con los mayordomos infieles que destruyen la tierra?

RESPUESTA:

  • Apo. 11:18—Dios destruirá a aquéllos que destruyen la tierra. 
7. ¿Será algo herido, muerto, o destruido en la nueva tierra?

RESPUESTA:

  • Isa. 11:9; 65:25—Nada dañará ni destruirá
  • Isa. 11:7—Los osos y los leones serán vegetarianos
  • Isa. 65:25—Los lobos y las serpientes serán vegetarianos/ comerán polvo. 
8. ¿Habrá alguna enfermedad, dolor, muerte, o pecado en la Nueva Tierra?

RESPUESTA:

  • Apo. 21:4—no habrá más llanto, ni muerte, ni clamor, ni dolor
  • Isa. 33:24—No habrá enfermedad y el que allí habite será absuelto de pecado. 
OBSERVACIÓN:

  • Como mayordomos de la creación de Dios se nos exige fidelidad en el cuidado de la tierra.
  • Si hacemos cosas que destruyen la tierra, que no son necesarias para vivir, entonces Dios nos destruirá a nosotros.
  • Nada hará daño o destruirá en la tierra nueva.
  • Incluso los animales que hoy son carnívoros serán vegetarianos.
  • No habrá más enfermedades, dolor, sufrimiento, muerte ni pecado en la Nueva Tierra o en el cielo.
PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR:

  • ¿Qué decisiones puedes tomar que te ayuden a cuidar mejor de la tierra?
  • ¿Qué decisiones puedes tomar que ayudarían a proteger a los animales para que no sufran?
  • ¿Qué puedes hacer para ayudarte a ti mismo y a otros para cuidar mejor de la tierra?
  • ¿Cómo el vivir como cristianos y el testificar de Cristo ayudan en poner límites al sufrimiento en esta tierra? 
9.  ¿Qué ánimo especial se da a quienes se ocupan de las cosas pequeñas?

RESPUESTA:

  • Lucas 16:10, 11—Los que son fieles en las pequeñas cosas serán fieles en las cosas grandes y serán contados como dignos de las riquezas eternas.
OBSERVACIÓN:

  • Jesús quiere que seamos fieles.
  • Los hábitos de fidelidad empiezan con cosas pequeñas y a medida que aprendemos a cuidar de las cosas pequeñas en la vida entonces nos serán confiadas las mayores riquezas—la vida eterna.
ESPÍRITU DE PROFECÍA

  • Si los hombres cumplieran sus deberes como fieles mayordomos de los bienes de su Señor, no habría quién clamara por pan, nadie sufriría privaciones, nadie estaría desnudo y con necesidad. Es la infidelidad de los hombres la que provoca el estado de sufrimiento en el que está sumergida la humanidad. Si tan sólo los que han sido hechos mayordomos utilizaran los bienes de su Señor para el propósito con que les fueron dados, no existiría este estado de sufrimiento. El Señor prueba a los hombres dándoles una abundancia de cosas buenas, así como probó al hombre rico de la parábola. Si somos infieles en las riquezas terrenales, ¿quién nos confiará las riquezas verdaderas? Los que han soportado la prueba en la tierra, los que han sido hallados fieles, los que obedecieron las órdenes del Señor de ser misericordiosos y de usar sus medios para el avance de su reino, oirán, de los labios de su Dueño: "Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor" (S. Mateo 25: 21). Review and Herald, 26 de junio de 1894. {Reflejemos a Jesus 220.6}
  • Sea progresiva la reforma alimenticia. Enséñese a la gente a preparar alimentos sin mucho uso de leche o mantequilla. Expliquémosle que llegará pronto el tiempo en que será peligroso usar huevos, leche, crema o mantequilla, porque las enfermedades aumentan proporcionalmente a la maldad que reina entre los hombres. Se acerca el tiempo en que, debido a la iniquidad de la especie caída, toda la creación animal gemirá bajo las enfermedades que azotan nuestra tierra. {JT, tomo 3, 139.2}
  • Vemos en la cara destruida de la naturaleza, en las rocas partidas, en las montañas y precipicios, lo que nos dice que un gran mal ha sido hecho, que los hombres han abusado de los dones de Dios, se han olvidado del Creador, y que el Señor se entristeció y castigó a los transgresores de su ley, y como resultado tenemos sus efectos en la creación. Las tormentas se descargan con violencia destructiva. El mal viene al hombre y la bestia y la propiedad. Debido a que los hombres siguen transgrediendo la ley de Dios, Él quita su defensa. El hambre, calamidad por el mar, y la pestilencia que camina al medio día, le siguen porque los hombres se han olvidado de su Creador. El pecado, la plaga del pecado, desfigura y echa a perder nuestro mundo, y la agonizante creación gime bajo el pecado de sus habitantes. Dios nos ha dado facultades para ser cultivadas, para mejorarlas para su gloria y para la eternidad. {2MR 308.1}
  • La raza está gimiendo bajo un peso de dolor acumulado debido a los pecados de generaciones anteriores. Y, sin embargo, con apenas una reflexión o cuidado, hombres y mujeres de la generación presente dan rienda suelta a la intemperancia hasta la saciedad y embriaguez, y con eso dejan, como un legado para la próxima generación, enfermedad, intelectos debilitados y costumbres corrompidas {Testimonios, tomo 4, pág. 31}. 
 CONCLUSIÓN:

  • Dios creó la tierra y es el dueño de ella.
  • Se nos ha confiado como mayordomos el cuidado de la tierra.
  • Los Diez Mandamientos son un cerco de protección especial para el pueblo de Dios y la creación pero si se los rechaza, entonces el valor de la vida y de toda la creación de Dios se pierden de vista. 
  • Por causa del pecado, toda la creación está sufriendo bajo la maldición.
  • Como mayordomos Dios requiere de nosotros que seamos fieles en cuidar la tierra.
  • Dios destruirá a todos los que destruyen la tierra.
  • ¡La Tierra Nueva y el cielo no tendrán nada que haga daño o que destruya; no habrá muerte ni dolor ni pecado—y aun los animales serán vegetarianos! 
PREGUNTAS DE APLICACIÓN:

  • ¿Estas haciendo todo lo que puedes para aliviar el sufrimiento de los animales y de los seres humanos?
  • ¿Tienes algunos hábitos que podrían ser modificados de manera que menos animales tengan que sufrir?
  • ¿Estás pidiéndole a Dios que te ayude a ser un mayordomo fiel?
  • ¿Haz entregado tus posesiones a Dios y buscas cuidar de esas cosas fielmente?
  • ¿Estás buscando salvar a tantas almas como te sea posible de la destrucción?

Monday, April 19, 2010

Apr17-23: El Agua de la Vida


Puntos de Enseñanza

1. Lee Juan 4:1-26 y considera las siguientes preguntas: 

PREGUNTAS:

  • ¿Cómo se acercó Jesús a la mujer?
  • ¿Le importaban a Jesús los prejuicios raciales?
  • ¿Qué pidió Jesús?
  • ¿Qué dijo Jesús acerca de la mujer que reveló que ella tenía sed espiritual?
  • ¿Qué le ofreció Jesús a esta mujer?
  • ¿Existe una sed espiritual en el corazón humano que solo puede ser satisfecha por el agua de vida de Cristo? 
2. ¿Qué revelan estos versículos acerca de la sed de la humanidad por Dios? 

RESPUESTA:

  • Sal. 42:1—Como el ciervo brama por las aguas así clama mi alma por ti.
  • Sal. 63:1—Mi alma tiene sed de ti.
  • Sal. 84:2—Mi alma anhela, desea ardientemente y canta al Dios vivo.
  • Sal. 143:6—Mi alma tiene sed de ti como la tierra sedienta.
3. ¿Qué hizo Israel para satisfacer su sed?

RESPUESTA:

  • Jer. 2:13—Se apartaron de la fuente de agua viva (Dios) para buscar su propia agua (los caminos del mundo que los rodea).
4. ¿Cuál es la respuesta de Dios para nuestra sed?

RESPUESTA:

  • Isa. 55:1—Venid a las aguas.
  • Juan 7:37—Si alguno tiene sed, venga a Cristo y beba.
  • Juan 4:14—El que venga a Cristo y beba, no tendrá sed jamás.
OBSERVACIÓN:

  • Jesús pidió que le diese de beber, lo cual tomó a la mujer por sorpresa debido a los prejuicios raciales que existían entre judíos y samaritanos.  Además, este hecho hizo que ella estuviera abierta para empezar una conversación.
  • Ella fue al pozo para saciar su sed física, pero Jesús sabía que en lo profundo de su interior ella tenía sed espiritual.
  • Ella había intentado satisfacer su sed espiritual teniendo varios hombres en su vida, pero esto la dejó más vacía, dolida e insatisfecha.
  • La solución para su sed espiritual no se hallaba en las cosas terrenales sino en Jesús.
  • A menudo nosotros hacemos lo mismo que esta mujer. Todavía intentamos apagar nuestra sed espiritual con el mundo, pero eso nunca nos satisfará.
  • David reconoció y describió acertadamente esta sed por Dios.
  • Los israelitas sufrieron el cautiverio porque se apartaron de Dios para satisfacer su sed a su propio modo.
  • Dios responde a nuestra sed llamándonos para encontrar nuestra satisfacción en Él.
5. ¿Qué es sed?

RESPUESTA:

  • Diccionario Webster 1828: SED.
    • 1. Experimentar una sensación dolorosa a nivel de la garganta o de las fauces por el deseo de beber. El pueblo sintió que se moría de sed allí. Éxodo 17:3.
    • 2. Tener un deseo vehemente por alguna cosa. Mi alma tiene sed del Dios vivo. Salmo 42:2.
6. ¿Qué evidencia del pasado revela que Dios suplirá nuestra sed tanto física como espiritual?

RESPUESTA:

  • Sal. 107:5, 6—Dios los ayudó.
  • Neh. 9:15—Él suplió a los israelitas con pan del cielo y agua de la peña.
7. ¿Qué promesas nos da Dios si nosotros tenemos hambre y sed de Él?

RESPUESTA:

  • Mat. 5:6—Los que tengan hambre y sed de justicia serán saciados.
  • Isa. 44:3—Él derramará aguas sobre nosotros y ríos sobre la tierra seca.
  • Isa 65:13—Mis siervos comerán, beberán y se regocijarán.
OBSERVACIÓN:

  • Tener sed es tener una sensación dolorosa causada por el deseo de beber agua o tener un ansia vehemente por algo.
  • Las historias que narran cómo Dios suplió el hambre y la sed del pueblo en el pasado pueden animar nuestra fe, pues podemos confiar que Él cumplirá sus promesas hoy.
  • Si tenemos hambre y sed de Dios, Él nos satisfará—comeremos, beberemos y nos regocijaremos en el Señor.
PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR:

  • ¿Qué elecciones están influyendo sobre tu satisfacción en la vida?
  • ¿Hacia quién o hacia qué te diriges para encontrar satisfacción?
  • ¿Es Jesús tu fuente de agua viva?
  • ¿Estás buscando a Dios para que llene tu hambre y sed de Él?
  • ¿Existen algunas cisternas rotas en tu vida al presente o en tu pasado?
8.  ¿Cuál es la invitación que Jesús te hace hoy?

RESPUESTA:

  • Ap. 22:17—“El que tiene sed, venga”.
OBSERVACIÓN:

  • A través de su Espíritu, Jesús te invita hoy a venir a las aguas de vida y beber de ellas.
ESPÍRITU DE PROFECÍA

  • Jesús no contestó inmediatamente la pregunta sobre sí mismo, sino que con solemne seriedad dijo: "Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, para siempre no tendrá sed: mas el agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna."  {DTG 157.1}
  • El que trate de aplacar su sed en las fuentes de este mundo, bebe tan sólo para tener sed otra vez. Por todas partes, hay hombres que no están satisfechos. Anhelan algo que supla la necesidad del alma. Un solo Ser puede satisfacer esta necesidad. Lo que el mundo necesita, "el Deseado de todas las gentes," es Cristo. La gracia divina, que solo él puede impartir, es como agua viva que purifica, refrigera y vigoriza el alma.  {DTG 157.2}
  • Jesús no quiso dar a entender que un solo sorbo del agua de vida bastaba para el que la recibiera. El que prueba el amor de Cristo, lo deseará en mayor medida de continuo; pero no buscará otra cosa. Las riquezas, los honores y los placeres del mundo, no le atraen más.  El constante clamor de su corazón es: “Mas de ti.” Y El que revela al alma su necesidad, aguarda para satisfacer su hambre y su sed. Todo recurso en que confíen los seres humanos fracasará. Las cisternas se vaciarán, los estanques se secarán; pero nuestro Redentor es el manantial inagotable. Podemos beber y volver a beber, y siempre hallar una previsión de agua fresca.  Aquel en quien Cristo mora, tiene en sí la fuente de bendición, "una fuente de agua que salte para vida eterna." De este manantial puede sacar fuerza y gracia suficientes para todas sus necesidades.  {DTG 157.3} 
  • El clamor que Cristo dirige al alma sedienta sigue repercutiendo, y llega a nosotros con más fuerza que a aquellos que lo oyeron en el templo en aquel último día de la fiesta.  El mandamiento está abierto para todos.  A los cansados y exhaustos se ofrecen la refrigerante bebida de la vida eterna.  Jesús sigue clamando: "Si alguno tiene sed, venga a mí y beba." "Y el que tiene sed, venga: y el que quiere, tome del agua de la vida de balde." "Mas el que bebiere del agua que yo le daré, para siempre no tendrá sed: mas el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna." Apocalipsis 22:17; Juan 4:14.  {DTG 418.1} 
 CONCLUSIÓN:

  • La humanidad tiene un vacío que necesita ser llenado.
  • Jesús es el único que puede llenar ese vacío o sed.
  • Tenemos la opción de ir hacia Jesús para llenarnos con el agua de vida o podemos tratar de apagar nuestra sed en las fuentes del mundo.
  • La forma de proceder de Dios en el pasado nos da la certeza que Él cumplirá sus promesas de satisfacer el anhelo de nuestras almas.
  • La invitación que todavía nos extiende es: ¿Estás sediento? ¡Ven, bebe y sáciate!
PREGUNTAS DE APLICACIÓN:

  • ¿Estás agradecido por la satisfacción que proviene de una relación de amor con Cristo?
  • ¿Estás apartándote de las cisternas rotas del mundo hacia la fuente de agua viva que procede de Cristo?
  • ¿Estás reclamando la promesa de que tu hambre y sed de justicia sean satisfechos?
  • ¿Tienes un anhelo o deseo vehemente para obtener más de Cristo y de su Palabra?
  • ¿Estás respondiendo a la invitación que Cristo te da para tener satisfacción verdadera?